El curso castellano de esquí de montaña 1982
PUERTO DE NAVACERRADA Y URBION
El curso castellano de esquí de montaña se realizó durante tres fines de semana consecutivos del mes de Enero de 1982. El 16 y 17 en Guadarrama (Puerto de Navacerrada con el fin fundamental de valorar el nivel de esquí de los participantes y profundizar en el mismo realizando prácticas de esquí de pista), el 23 y 24 en los Picos de Urbión y por último el 29, 30 y 31 en Gredos.
Los inscritos fueron 22, de los que el grupo mayoritario (9) era del Club Alpino Popular.
En la primera actividad en Guadarrama se pernoctó en el albergue de la Sociedad Deportiva Excursionista (ya no existe, fue derruido por la Comunidad de Madrid y la cafetería-restaurante Dos Castillas que estaba en sus bajos se trasladó justo enfrente, en lo que fue la parte nueva de la antigua Venta Arias) dedicándose el sábado a actividades teóricas de técnica, material y su conservación y avalanchas. El domingo prácticas de esquí alpino que no comenzaron con buen pie porque uno de los monitores sufrió un accidente con rotura de ligamentos.
De la segunda, poco hay que decir, porque tras un sábado teórico en Soria, el mal tiempo condicionó la actividad práctica ,que se limitó a unos recorridos en las cercanías de la Laguna Negra de Urbión.
29, 30 y 31 DE ENERO. CIRCO DE GREDOS
Pero la actividad en el Circo de Gredos supuso un hito inolvidable para todos los que tuvimos la suerte de participar.
El autobús lo fletó el Club Alpino Popular y partió completo con los cursillistas, profesores y otros acompañantes. Como era habitual en estos casos, salió a última hora de la tarde, después de las 8, desde el clásico punto de partida de Casa Mingo en el Paseo de la Florida. Con este horario, llegó a la plataforma de Gredos a las doce y media de la noche donde, tras la gran nevada que había caído en días anteriores y a pesar de haber pasado un quitanieves que dejó un estrecho paso, accedió con dificultad a la plataforma.
Se había previsto la pernocta con sacos de dormir en el refugio del Prado de las Pozas (que muchos recordarán abandonado en un extremo, en los años en que el guarda a caballo perseguía a los montañeros para cobrar la tasa de paso, ya que toda la zona era propiedad de una señora que al parecer ostentaba el título de marquesa, estos terrenos fueron adquiridos años después por el estado) que acababa de ser acondicionado y abierto bajo el nombre de “Refugio de Reguero Llano” por José Núñez, hijo del guarda mayor de Gredos.
A la una de la madrugada un espectáculo sorprendente: Un reguero de 40 esquiadores de montaña perfectamente equipados con sus prendas de abrigo, sus esquíes con las pieles de foca, y los frontales encendidos, remontando por la nieve fresca hacia el refugio.
Pocas horas de dormir tras una frugal cena, porque al alba ya todo el mundo se preparaba para partir de nuevo en dirección a Navasomera y Morezón. Amaneció por el camino, y tras una breve parada en la cumbre….nos lanzamos por las empinadas rampas nevadas hasta el fondo del circo. Algo espectacular porque tras la semana anterior caer grandes nevadas, el temporal había dado paso a un día de sol totalmente despejado y el estado de la nieve en polvo virgen generaba fuertes sensaciones en el descenso. Al poco, ya en el refugio de la Laguna Grande (que se encontraba helada y cubierta de nieve) y tras dejar la impedimenta de dormir, de nuevo hacia las cumbres del Venteadero y Cabeza Nevada. Prácticas…bajada esquiando hasta el refugio…y de nuevo con las pieles de foca hasta el Venteadero, desde donde, ya que la nieve lo permitía y tras bajar unas empinadas y estrechas canales, se esquió de lado a lado del circo a media ladera para bajar de nuevo de frente hasta el refugio.
El domingo, tras una nueva ascensión al Venteadero, bajada esquiando hasta un lugar intermedio a la Laguna Grande con un gran bloque de roca apto para realizar el rappel con esquíes y prácticas de rescate de heridos en pared con nieve ,que fueron impartidas por Ezequiel Conde y Miguel Angel Vidal.
Con unas últimas prácticas de búsqueda tras avalancha y evacuaciones en camilla se partirá de nuevo hacia el Morezón y Barrerones, desde donde el descenso es agradable, amplio y cómodo hacia el Prado de la Pozas.
Es conocido lo que ocurre en un fin de semana de sol tras una gran nevada. Multitud de turistas habían acudido a la plataforma. Con la adrenalina subida ya no nos era posible parar y a toda velocidad enfilamos la calzada romana…esquivando decenas de personas aterrorizadas por el camino que se apartaban a los lados en la medida de lo posible…se escuchaban algunos comentarios poco halagüeños…recordemos que éramos cuarenta los que a toda velocidad pasábamos uno tras de otro entre los caminantes…..
La plataforma estaba bloqueada por los coches, por lo que el autobús tuvo que quedarse en la curva del km. 7 de la carretera que accede desde Hoyos del Espino…accedimos a él sin mayor dificultad y sin quitarnos en ningún momento los esquíes.
LA CLAUSURA DEL CURSO
La comida de clausura estaba prevista en la Venta de la Rasquilla…pero llegamos para la cena, a la que hicimos honor tanto por cumplir la reserva como porque el cuerpo nos lo reclamaba insistentemente. Imágenes grabadas en el recuerdo: Repartidos por viejas y pequeñas habitaciones de 4 o 5, la ventera repartiendo las truchas y los puñados de patatas con la mano en los platos, las mujeres cantando mientras fregaban los cacharros en un lavadero en la tierra a la luz de las bombillas incandescentes … estampas de otra época que hace mucho que desaparecieron. En el entorno del norte de la Sierra de Gredos fueron habituales hasta mucho más tarde que en otras partes de España.
Dormidos en el autobús, nuestro, despertar fue en la puerta de Casa Mingo en la madrugada del lunes. Agotados, pero con la conciencia de haber vivido algo único e irrepetible.
La clausura y entrega de diplomas al final se realizaría el 9 de Febrero en el local del Club Alpino Popular y -como era habitual en esa época- viendo las diapositivas del curso.
Participaron por parte del Club Alpino Popular Carlos García, Luis Miguel Tordesillas, Miguel Rubio, Alejandro Rapallo “Escala” y otros socios. Uno de los profesores era José Luis Ibarzábal .
Podéis descargar el artículo publicado en el número 3 de la revista del club “Piornal” del mes de Marzo de 1982.