Aunque en el último año su amistad aumentó, la salida del colegio separó momentáneamente sus trayectorias. No sería hasta 1969 cuando se encontraron de nuevo preparando oposiciones para el ingreso en entidades bancarias, que en aquel momento experimentaban una fuerte expansión y precisaban ingentes cantidades de nuevo personal en trabajos bien remunerados.
Al final Luismi entraría en el Banco Coca (luego Banesto y al final Santander) y Carlos en el Banco Popular. Pero antes ya había prendido a través de la montaña el vínculo que los ha unido de por vida y que los llevó con los años a diseñar y poner en marcha el proyecto de Montañeros Madrileños.
Ya en 1970 empezaron a realizar las primeras salidas a la montaña en conjunto, primero con el hermano de Luis Miguel y otros amigos y luego por su cuenta. En 1971 vendrían las primeras experiencias con el esquí en el Puerto de Navacerrada y posteriormente en La Pinilla. Luis Miguel, con unos esquíes de madera fabricados cuidadosamente por su padre en capas pegadas, unas buenas manos de Titanlux, cantos metálicos atornillados y ataduras semiautomáticas, lo que en esa época era un lujo. Y Carlos con unos esquíes Attenhofer de tensor de muelles y correas de cuero.
A finales de 1971 Carlos promovió junto con otros amigos/as aficionados del Banco Popular el Club Alpino Popular. Ahí comienza una nueva etapa